viernes, mayo 11, 2012

Sólo temo a mis enemigos cuando empiezan a tener razón. (Jacinto Benavente)

Hoy recordé una anecdota que merece mucho su lugar en este sitio. Habiendo sucedido hace unos años ya, me pregunto porque no la puse antes. ¿Quien sabe? Quizá era más generoso.
Subimos con mi novia a un taxi para ir adonde vivía en aquel entonces, en el barrio de Villa Crespo.
-Antezana y Acoyte, por favor.-fue más o menos lo que le dije.
-No puede ser, son paralelas.-me respondo el taxista.
-Vivo ahí, es al 1400 de Acoyte.-le retruco.
-Esa dirección no existe.-continua el necio.
Supuestamente un taxista conoce la ciudad, y si no la conoce por ese lado, le pide orientación al pasajero que si se ubica en el lugar de destino. Igualmente, estabamos a unas veinte cuadras, en Caballito, barrio aledaño a Villa Crespo. Después de vivir por más de veinte años ahí, era ponerse demasiado en ortiva en decirle al tachero: "Vos sos un bruto y encima necio". Por lo que preferí decir:
-Vivo ahí, si existe. Andá al 1400 de Acoyte.-
-¿Vos querés ir al 1400 de Acoyte? Bueno, vamos al 1400 de Acoyte.-responde entre ofendido y obsecado, creyendo que tenía toda la razón.
Cuando me bajé, el tema ya estaba zanjado, estaba demás decirle "¿quien tenía razón?", pero me deja pensando en la necedad humana. Un taxista que cometa este error, es peor que si lo hiciera cualquier otra persona. Porque no se espera que se sepa todas las calles, pero si está tan seguro, que constate su información. Sino, viví en la frontera con la Dimensión Desconocida y el País de las Maravillas, ya que el zoquete este aseguraba que no existía.
QuE Hiiiiiijo de...!

No hay comentarios.: